All Chapters of Amor esclavo de la pasión del jefe de la mafia: Chapter 121 - Chapter 130

Harvey mantuvo las caderas de Amelia en su lugar antes de comenzar a empujar desde abajo, clavando su enorme varilla aún más profunda en su coño. Amelia gritó ante su repentino movimiento. Podía sentir que su poder penetraba profundamente en ella. Él se estaba moviendo a una velocidad tan rápida que ella se sorprendió tanto por su resistencia como por el placer que le hacía sentir. A ella le encantaba hacerle el amor a Harvey. Él era tan diferente de todos los hombres que ha tenido antes. "Voy a... semen... Harvey ..." Amelia gimió. "Adelante... te haré correrte toda la noche..." Harvey le susurró tiernamente al oído. No pasó mucho tiempo después de que Amelia llegó a su clímax. Ella lo abrazó mientras gritaba su nombre mientras su cuerpo temblaba en sus brazos. Harvey sabía que Amelia podría llegar al clímax varias veces y continuó golpeando su gruesa polla en su agujero antes de acostarla lentamente sobre su espalda en la cama. Levantó sus piernas y las colocó sobre sus hombros

No quería creerlo, pero de alguna manera, he sobrevivido tanto bajo este contrato. Sin necesidad de mirar el calendario, sabía que solo me quedaban 7 días. En otras palabras, solo queda una semana hasta que expire el contrato y recupere mi libertad. Lo que sea que eso signifique...El ático estaba en silencio y me preguntaba si Hayden todavía estaba dentro. En realidad, sabía en el fondo que ya no estaba aquí. Mi pecho se sentía apretado, y supongo que era una decepción o algunos sentimientos que eran muy similares que estaba sintiendo. Aunque, no sabía cómo enfrentarlo o cómo debería actuar a su alrededor, supongo que algunas partes de mí todavía quería ver a Hayden después de todo. Salí de mi habitación después de ducharme y vestirme. No era que tuviera opción. Si él no estaba aquí, entonces no estaba. La triste sonrisa de la tía al saludarme fue suficiente confirmación de que Hayden se había ido esta mañana. No, quizás se fue anoche después de que yo volviera a mi habitación. No t

"Ya veo. Creo que conozco el lugar...", dijo Hayden. La forma en que su cara se iluminó me hizo saber que una idea se le había ocurrido. En cuanto a si la idea era buena o no, estaba a punto de averiguarlo. Después de un tiempo de conducir en su coche, llegamos al destino que Hayden tenía en mente. Este lugar parece un zoológico, pero no realmente..."¿Qué es este lugar?" Pregunté con curiosidad. "Un preserva torio de tigres," contestó Hayden mientras tomaba mi mano y me ayudaba a salir de su coche. "¿Un preserva torio de tigres?" Dije incrédulo. ¿Este lugar grande es una granja del tigre? Nunca supe que tal lugar existió. Estaba medio esperando que me llevara al zoológico basado en mi opinión de gustar animales esponjosos. Un preserva torio de tigres estaba más allá de mis expectativas. "Supongo que nunca has estado en uno antes. No son tan comunes... supongo..." Hayden dijo mientras empezaba a llevarme con él. "¿Qué vamos a hacer aquí exactamente?", pregunté. El lugar era mu

"No pensé que te interesaría tanto el arte..." me las arreglé para decirlo después de una breve pausa. "Es mi trabajo estar interesado en cualquier cosa que pueda hacer un gran beneficio en el mercado negro," Hayden respondió casualmente. "Ya veo..." susurré. "Déjame adivinar..." dijo Hayden con un destello de maldad en sus ojos. "¿Acerca de?" Pregunté, no siguiendo. "Una de las cosas que te gusta de Ethan es su buen sentido en el arte, ¿verdad?" Hayden preguntó tan abruptamente que todo lo que podía hacer era pestañearle un par de veces mientras sus palabras empezaban a hundirse. Bien. No esperaba que Hayden criara a Ethan. Tampoco esperaba que lo hiciera bien. Era cierto, me gustaba Ethan porque parecía tener un ojo muy agudo para el arte. Su obra de arte no es mala, pero siempre he pensado que tenía

"Vamos. Hemos terminado aquí", dijo Hayden mientras tomaba mi mano y me levantaba de mi asiento."Ok..." murmuré suavemente mientras le seguía de cerca.Disculpándonos por la fila de asientos, finalmente logramos salir del teatro. Había más luz afuera en el pasillo y podía ver a Hayden más claro ahora. "¿Por qué pagaste tanto por la pintura?!" Grité en pánico.¿"300 millones de dólares? No es nada. Se supone que es una buena inversión, ¿verdad?", dijo Hayden antes de sonreírme con confianza. Dije que me gustaba la pintura de las otras del libro, ¡pero nunca dije que fuera una buena inversión! Suspiré en voz alta, sabiendo que decirle eso a Hayden no cambiaría en absoluto su forma de pensar. "¿Quieres ver más de cerca de nosotros compra?", sugirió Hayden.