Capítulo 7

Los labios de Luna se torcieron con incredulidad. "Señor Lynch, ¿me está bromeando? Una mujer como yo, que se comportó de manera sospechosa delante de usted, que incluso mi nombre fue copiado de su ex esposa, ¿está seguro de que quiere contratarme?".

Joshua sabía que Luna se estaba burlando de él.

El hombre entrecerró los ojos levemente.

Si no fuera por el hecho de que Nellie acababa de llegar a casa y él no entendía el temperamento de la niña, no dejaría a un lado su orgullo y contrataría a esta mujer extraña.

Había leído algo sobre ella de camino a su apartamento.

Era una mujer que acababa de regresar del extranjero, no tenía problemas financieros, sin embargo el primer trabajo que solicitó después de regresar al país fue un puesto de niñera en la Villa Bahía Azul.

Si no era él o el Grupo Lynch, ¿cuál era su objetivo?

"A ver a ver".

Justo cuando los dos estaban en un punto muerto en la puerta, una exclamación de sorpresa de sus vecinos llegó desde el pasillo. "Ése es... el Señor Lynch, ¿verdad?".

Joshua era un hombre de negocios sumamente exitoso que siempre aparecía en las noticias financieras. Solo unos pocos en la Ciudad Banyan no lo conocían.

La voz del hombre detrás de él hizo que las cejas de Joshua se fruncieran ferozmente.

En el siguiente segundo, agarró a Luna del brazo e hizo que se moviera a un lado, entrando a grandes zancadas en la puerta.

¡Bam! La puerta se cerró con fuerza.

La voz de un vecino vino desde afuera de la puerta: "¿Te equivocaste?".

"¿Cómo puede una persona importante como el Señor Lynch venir a un vecindario pobre como el nuestro y que una mujer le niegue negar a su casa?".

"El Señor Lynch tiene una prometida, y han estado comprometidos durante cinco años...".

Sus voces se desvanecieron gradualmente.

Después de que desaparecieron, Luna se volteó hacia Joshua, con los brazos cruzados sobre el pecho. "Tienen razón, Señor Lynch. Un hombre como usted no debería venir a un vecindario pobre como el nuestro".

Joshua levantó la cabeza y silenciosamente recorrió con la mirada los muebles del apartamento.

Había cuadros en la pared, plantas verdes en la mesa y un osito de peluche en el armario de la entrada.

Aturdido, él sintió como si hubiera regresado al pasado, de hacía seis años.

Cuando él y Luna se acaban de casar, ella se ocupaba de la casa.

"¡Necesitamos colgar algunos cuadros aquí para que se vea mejor!".

"¡Las plantas ponlas aquí, y te darán algo de aire fresco!".

"Puse un osito en el armario de la entrada, así sentirás como si alguien te saludara tan pronto como entres...".

Joshua bajó la cabeza mientras miraba a la mujer que también tenía ojos hermosos como los de Luna Gibson.

Esta mujer, cuyo nombre también era Luna, parecía estar imitando intencionalmente a Luna.

Desde su forma de caminar, su figura, hasta sus adornos favoritos; ¡ella estaba imitando todo!

Era fácil descubrir qué le gustaba a Luna Gibson.

Luna Gibson era una artista con una fama bastante grande, ya que disfrutaba compartir sobre su vida e inspiración en redes sociales.

Todo lo que aparecía en Internet permanecía en Internet. Siempre que quisiera, fácilmente podría averiguar sobre los intereses y hábitos de Luna Gibson.

Su mirada se posó en la cafetera.

Se burló sin emoción mientras se sentaba en el sofá. "¿A la Señorita Luna también le gusta tomar café?

Luna frunció el ceño, simplemente tarareando en respuesta.

Joshua levantó su taza y tomó un sorbo antes de que una sonrisa fría emergiera lentamente.

Era Arábica, pero el favorito de su esposa Luna Gibson era Robusta.

Él levantó la cabeza, frotando suavemente los dedos contra el exterior de la taza. "Qué lástima, Señorita Luna. No solo imitó los hábitos y el comportamiento de mi esposa, incluso diseñó su lugar para llenarlo con el toque de mi esposa...".

"Pero, qué pena, el café la delató. A mi esposa le gusta tomar café, pero como yo, prefiere Robusta. Ella nunca tomaría granos de Arábica".

Luna hizo una pausa y comprendió el significado de sus palabras.

Ella se rio. "Veo que a su ex esposa le gusta Robusta".

Cuando estuvieron juntos, accidentalmente descubrió que a él le gustaba Robusta, así que le dijo que a ella también le gustaba Robusta.

Sin embargo, si él hubiera prestado más atención, se habría dado cuenta de que los granos que ella prefería eran los granos Arábica.

"Como esperaba, lo está haciendo a propósito".

Bajó su taza estrellándola contra la mesa de cristal y este resonó fuertemente.

Los profundos ojos de Joshua la miraron con frialdad. "Pasando por todo este esfuerzo para imitar a mi esposa, ¿qué quieres? La idolatras, así que quieres ser como ella. ¿Es eso? O me idolatras, así que quieres imitarla para complacerme".

"¿Cuál de esas dos preferirías?".

Joshua la miró con los ojos entrecerrados. "Si tu objetivo es acercarte a mí, te sugiero que te rindas ahora".

Luna bostezó, luciendo aburrida y desinteresada. "Eso es porque nunca la amaste. No importa cuánto yo la imite, no te interesará, ¿verdad?".

Joshua la miró con frialdad, aunque permaneció en silencio.

Su mirada no se inmutó cuando ella abrió la boca y continuó: "Señor Lynch, dígame, si quisiera complacerlo, ¿no debería intentar imitar a su prometida? Dado que ella pudo convertirlo de un ex cuñado a un prometido, usted debe amarla profundamente".

'Amarla profundamente'.

Esas dos palabras hicieron que sus cejas se fruncieran.

Después de un momento, la miró y dijo, palabra por palabra: "Me comprometí con Aura porque era el último deseo de mi esposa".

"¿Fue una petición de su esposa antes de morir?".

Luna tenía una pierna suya sobre la rodilla de la otra, con expresión tranquila como el agua, ¡pero la verdad era que estaba temblando por dentro!

Hacía todos esos años, la trataron con tanta crueldad, pero incluso muchos años después, ¡todavía se atrevía a decir que ése era su último deseo! ¡Pura mentira!

Estabilizando la mano que sostenía la taza, ella bajó la cabeza y tomó un sorbo. "Su esposa es una mujer tan amable que, incluso después de su muerte, aún quería entregar a su marido a otra persona".

Los ojos de Joshua se volvieron helados.

La miró con frialdad. "Recuerda tu lugar. No quiero escuchar esas palabras en el futuro".

Con eso, él sacó su teléfono y marcó un número.

No mucho después, la puerta del apartamento se abrió de golpe desde el exterior, Lucas entró y colocó un documento en la mesa de café. "Señorita Luna, éste es su contrato laboral. Si no está satisfecha con algo, díganoslo y haremos todo lo posible para complacerla".

Luna levantó el contrato y comenzó a leer.

"Ser niñera es solo mi trabajo de tiempo parcial". Ella señaló uno de los términos del contrato y dijo a la ligera: "Pero por el momento, concentraría la mayor parte de mi tiempo y esfuerzo en la Princesita".

Luego señaló algunos términos en detalle y proporcionó una solución.

Luna y Lucas estaban completamente inmersos en su conversación.

Joshua permaneció en su asiento en la esquina, con una mirada débil mientras veía fijamente a la distancia.

Sus ojos se desviaron débilmente, sin saber lo que estaba pensando.

Media hora después, se completaron las negociaciones.

Luna tomó el bolígrafo y anotó solemnemente su nombre.

Con un trazo de su pluma, representaba que su plan de meterse a escondidas en la Villa Bahía Azul fue un éxito.

Después de firmar el contrato, Joshua se levantó para irse cuando sonó su teléfono celular.

"Señor", el mayordomo sonaba ansioso, su voz llegando desde el otro extremo del teléfono. "¡La Señorita Aura Gibson está aquí! Arrastró a la Señorita Nellie fuera de su habitación, ¡llamándola falsa! ¡Vuelva a casa rápido!".