Capítulo 4350

Zella se había ido. Se sacrificó para abandonar la ilusión. En este momento, solo James y Wynton permanecían en el mundo ilusorio.

Wynton se puso una túnica blanca que permanecía sin mancha e inmaculada. Con las manos a la espalda, irradiaba un aire de compostura y seguridad en sí mismo. Mantenía la calma a pesar de que James era un oponente de talento, una auténtica potencia.

Su compostura y tranquilidad formaban parte de su personalidad, pero también se habían desarrollado a lo largo de innumerables batallas. Se mantenía imperturbable y con los pies en la tierra sin importar a quién se enfrentara.

James guardó las inscripciones dejadas por Zella. Emitía un halo blanco, exudando una sensación de divinidad.

Ambos estaban en la cima de sus respectivas montañas, mirándose, sin hacer el primer movimiento. Sus auras ya estaban entrelazadas aunque no se habían movido de su lugar.

Dos poderosas auras agitaron los vientos y las nubes, haciendo que el siempre cambiante cielo se moviera